MENÚ

CERRAR

Calle Argenters 11
08130 Santa Perpètua de Mogoda,Barcelona

tc@tech-complex.com
+34 93 718 22 15

Volver al  Blog

Pienso de inicio en pollitos: cómo lograr un arranque exitoso y un lote homogéneo

Jul 21, 2021

Artículo de Livestockworld

El principal desafío en el inicio de la vida del pollito es lograr un consumo rápido y adecuado del pienso de arranque (starter feed). Durante los primeros 7 días tras la eclosión, el pollito afronta múltiples retos: pasar de respirar dentro del cascarón a hacerlo de forma autónoma, regular su temperatura corporal, adaptarse a un ambiente desconocido y localizar las fuentes de agua y alimento sin la guía de una gallina madre.

En un entorno natural, la madre indica dónde está el alimento y cómo ingerirlo. En avicultura intensiva, sin esta referencia, la atractividad sensorial y palatabilidad del pienso inicial se vuelven determinantes.

Estos primeros días son decisivos para asegurar la correcta expresión del potencial genético:

  • En pollos de engorde, donde los ciclos productivos son cada vez más cortos y eficientes, un arranque rápido es esencial para alcanzar el peso objetivo en el menor tiempo posible.

  • En ponedoras, cuyos ciclos productivos se han alargado gracias a mejoras genéticas, sanitarias y de manejo, un buen arranque es clave para sostener la persistencia de puesta y la calidad del huevo a lo largo de un periodo productivo más largo.

La fase crítica del arranque

Al salir del huevo, el pollito todavía dispone de nutrientes del saco vitelino, pero su aparato digestivo entra en rápido desarrollo: el intestino y sus vellosidades intestinales completan su formación y comienzan a funcionar. La ingesta temprana de pienso estimula este crecimiento y acelera la maduración digestiva, mejorando la capacidad de absorción de nutrientes.

Un consumo homogéneo y suficiente en la primera semana es clave para:

  • Alcanzar un peso vivo óptimo al inicio de la fase de crecimiento o postura.

  • Garantizar la homogeneidad del lote, reduciendo la dispersión de pesos.

  • Minimizar pérdidas productivas futuras, ya que cualquier retraso en la ingesta inicial es prácticamente irrecuperable.

Factores que pueden limitar el consumo temprano

  • Estrés ambiental (temperatura, ventilación, iluminación).

  • Estrés social o falta de aprendizaje en el lote.

  • Enfermedades en la fase inicial.

  • Pienso con baja palatabilidad o ausencia de estímulos visuales/olfativos.

Herramientas para impulsar el arranque

  • Mejorar la palatabilidad y atractivo del pienso mediante ingredientes de alto valor organoléptico.

  • Técnicas de in ovo feeding, aportando nutrientes antes de la eclosión para un arranque más rápido.

  • Monitorizar indicadores de comportamiento temprano como el “chick peeping” (vocalizaciones), asociados a bienestar y actividad alimentaria.

En definitiva, el éxito productivo comienza en la primera semana de vida. Un pollito que arranca bien, que ingiere pienso de forma rápida y homogénea, tiene más posibilidades de expresar su potencial genético, optimizar la conversión alimenticia y alcanzar los objetivos productivos, ya sea en carne o en huevos.

Ver artículo